Actualidad municipal

Aguilafuente se reivindica como el origen del primer libro impreso en español

Más de 3.000 personas asisten este fin de semana a los diferentes actos del Sinodal

Hay inventos que cambian el rumbo de la historia y esto es lo que sucedió a mediados del siglo XV cuando el alemán Johannes Gutenberg creó la imprenta. Toda una sofisticación para la época que en España hizo acto de presencia gracias al empeño del obispo de Segovia, Juan Arias Dávila, quien logró superar las reticencias y oposiciones encontradas para impulsar el primer texto impreso en España de la mano de Juan Párix.
 
Un hecho trascendental que Aguilafuente recrea este fin de semana en la decimotercera edición de El Sinodal de Aguilafuente, que conduce al espectador hasta 1472 para conmemorar las actas del sínodo que tuvo lugar en la iglesia de Santa María, que quedaron plasmadas para la posteridad gracias al invento germano.
 
La localidad se convierte en un gran escenario. Banderolas, estandartes y la participación de unos 150 vecinos con trajes de época o pendientes de todas las infraestructuras hacen retroceder al espectador más de cinco siglos. Un pasacalles de animación con dos juglares da el pistoletazo de salida para contar lo que sucedió en esta villa, donde pregonan a los cuatro vientos que «la cultura siempre hacia adelante». 
 
‘Las Fabetas' y ‘El impresor clandestino' recorren las calles de Aguilafuente entre la sorpresa, admiración y oposición del pueblo al desconocido invento y las consecuencias para Sebastián Jaramillo por osar construir una imprenta y repartir sus escritos. El miedo a la extensión del conocimiento, al riesgo de que el pueblo llano llegue a saber lo mismo que el clero y la nobleza son algunos de los obstáculos que se encuentra la imprenta a su llegada a España y lo que se representa hasta hoy en esta localidad segoviana.
 
Doce funciones y seis obras
 
El encuentro de Juan Párix y el obispo Arias Dávila narrado en ‘El Obispo y el Impresor', ‘La Curandera', ‘El Romance del Sinodal' y ‘La Presentación del Sínodo' son otras de las obras que cuentan lo acontecido durante aquellos días, hasta llegar a la noche con la obra ‘La reina y el obispo', que se sitúa en Segovia en 1476 y cuenta cómo la reina Isabel tuvo gran importancia en el impulso de la imprenta. Esta última representación levanta el imaginario telón de la iglesia de Santa María cada noche del Sinodal.
 
En total, doce funciones de seis obras de teatro realizadas durante tres días en las que participan unos cincuenta actores aficionados, que comenzaron a ensayar a principios de julio guiados por profesionales para que los espectadores disfruten estos días. «Lo que más sorprende es la entrega, la dedicación y la ilusión que tienen porque sacan tiempo de su ocio para entregarlo al teatro y al espectáculo del Sinodal», explica el director de la compañía Estudio La Recua, Miguel Gómez.
 
Guiones ágiles, con textos largos y lenguaje de la época hacen que el factor sorpresa siempre esté presente, ya que «los que vienen se sorprenden por la calidad de las obras», asegura el presidente de la Asociación del Sinodal de Aguilafuente, Fermín de los Reyes.
 
Pero la fiesta medieval en Aguilafuente es mucho más. Exposiciones, cuentacuentos para niños, danzas medievales, un taller de costura, actuaciones musicales y un mercado de época son otros de los alicientes. Jabones, juguetes artesanales, anillos, pendientes o alimentos son algunos de los productos que se pueden encontrar hasta la jornada de hoy en los veintidós puestos que han llegado a Aguilafuente procedentes desde diferentes puntos del país. Los ocho bares del municipio también participan en la cita con una ruta de tapas.
 
Cena medieval
 
Además la convivencia está muy presente en esta fiesta. De hecho, la jornada de ayer finalizó con una cena medieval para unas 250 personas en la plaza del Sínodo, donde los asistentes pudieron disfrutar de un cerdo asado de unos 110 kilos que se estuvo cocinando allí mismo desde las ocho de la mañana a fuego lento con leña. «Lo más complicado es hacer el interior porque es lo que más tiempo lleva», explicaban los responsables del festín, Juan Carlos Frías y Pablo de Lucas. Después los asistentes pudieron disfrutar de un concierto del grupo Castijazz.
 
La recreación de El Sinodal de Aguilafuente continuará este domingo con animados pasacalles, los cuentacuentos, las danzas medievales o la exposición sobre el obispo Juan Arias Dávila que se encuentra instalada en diez paneles en la fachada del Ayuntamiento del municipio.
 
Estos actos reúnen a lo largo de todo el fin de semana a unas 3.000 personas, que gozan con la oportunidad de recordar aquel importante momento para el devenir cultural que cambiaría la divulgación del conocimiento en España.
 
Fuente de la noticia: El Norte de Castilla, 2 de Agosto de 2015